El barco...3ª parte, el desenlace

En el capítulo anterior de "El Barco" nos habíamos quedado con la frase "Cómo que dónde hay que coger el barco!!! Casi al unísolo le dijimos:" Levántate y arranca con un coche pal sur!!!!". De esta manera Eduardo emprendió rumbo a Los Cristianos en pos de lo imposible. Mientras nosotros, también de camino hacia el Sur, hacíamos nuestros cálculos sobre si llegaría a tiempo o no. Parecía que había posibilidades pero nos acordamos que Zapatito, ese al que no sé si siguen llamando Bamby nos había obligado a jugar una partida relámpago pero con handicap: la famosa barrera de los 110 Km/h. Así que no teníamos claro si Eduardo estaba en condiciones y con ganas de desafiar a los posibles controles de velocidad en pos de conseguir superar esta complicada prueba: llegar antes de las 8:55am al Puerto de Los Cristianos donde esperaba el FredOlsen para La Gomera.

A todo ésto, estando la situación al límite se te pueden ocurrir ideas tragicómicas o de guión de película como :" Quién se anima a simular un infarto una vez dentro del barco para retrasar la salida...". Yo personalmente ya lo daba por perdido, me lo iba tomando con resignación y sólo confiaba, iluso de mí, en un auténtico milagro. Bueno, también pesaba que podría pasar como esas superproducciones americanas en las que en el último minuto de la película el chico guapo salva al mundo, derrota al malo y se lleva a la chica guapa:

David, despierta!!! ésto no es una película, es la realidad y no tenemos un superpresupuesto para conseguir ese final feliz que te imaginas.

Al puerto llegamos sobre las 8:35am, quedaban unos 25 minutos para que saliera el barco. Coger el primer barco de la mañana tiene su parte buena y su parte mala. En este caso para nosotros bueno y malo era lo mismo, qué contradicción no? Al ser el primer barco ya está en puerto desde la última vez que llegó, eso significa que no puede llegar con retraso, con lo que en este caso se cumplirá mi ley de Morphy particular: "Si tiene que salir a las en punto, seguro que sale antes".

Llegamos al mostrador y procedemos a sacar tarjetas de embarque. La chica nos dice que para sacar las tarjetas necesita los cuatro dnis. Le comentamos que uno de los componentes está de camino. La chica, muy amablemente nos comenta que al haber sido sacado en grupo habría que anular el pasaje de Eduardo. Como ven ya la cosa se iba complicando más...Le preguntamos que hasta que hora podemos aguantar, nos comentan que normalmente hasta las 8:50am pero se podía apurar hasta 5 minutos antes de la salida. Bueno, a estas alturas las cartas estaban ya prácticamente servidas:

Con estas cartas tan malas sólo podíamos esperar. El tiempo pasaba sin compasión, el barco no presentaba anomalías, se palpaba en el ambiente la tragedia, etc...Y el reloj marcó las 8:55am. última llamada a Eduardo:

David: Por donde andas?

Eduardo: Por Parque La Reina, me falta unos 5km.

Se produce un silencio...

La Chica: No se puede esperar más, ya tienen que entrar por bodega.

David: Carlos, anula el pasaje de Eduardo y saca los nuestros.

Ya dentro del barco suena el móvil de Mario. Era Eduardo: "Acabo de llegar, les estoy viendo salir":

Ya no había remedio, el siguiente barco salía al mediodía y no hay guaguas para La Gomera. Tanto la historia como el final ya lo sabían muchos, simplemente quería exponer de manera un poco desenfadada la crónica de una muerte anunciada. Con el paso de los años hasta lo recordaremos con humor. Ojalá de esta aprendas Eduardo, aunque chocar con la misma piedra por segunda vez no es muy complicado.

Hasta aquí el relato, la próxima será ya la crónica de los que llegamos a La Gomera.