Es fin de semana y comienza el I Festival de Ajedrez Activo de la Laguna. Cuando hay torneo prácticamente vives esos días para él. El 13 de Agosto se empezó muy bien, hacía tiempo que no empezaba un torneo con 4 de 5.Hubo buen juego y algo de suerte, pero para poder tener suerte hay que estar ahí, sufrir en los momentos difíciles y esperar la oportunidad para poder aprovechar el despiste del contrario.
El primer día tuve dos buenas partidas, una contra Adrián Lestao y otra contra Luis León Varela. Luego me topé con el siempre duro y seguro Jorge Cabrera que no me permitió gran cosa. Terminas el sábado y la cabeza empieza a maquinar.Es normal, porque después de empezar muy bien, al día siguiente hay que hacerlo mejor si quieres estar en los primeros puestos. Empezé el domingo jugando con Pedro Tomás Pérez. Tuve la oportunidad de quedar en una muy buena posición pero fruto de los nervios me bloqueé y no vi la jugada correcta. Fui totalmente a remolque toda la partida, estaba perdido. Pero es lo que tienen este tipo de ritmos, un desliz de mi contrincante me permitió arrancar unas valiosas tablas. Ya en la siguiente vino otro de los rocosos jugadores, Alberto Hernández. Empezé bien, pero otra vez un despiste de cálculo simple me llevó a una derrota clamorosa. Era consciente de que ya había que ganar las dos partidas que quedaban. La primera fue relativamente fácil, Luis Darias no planteó mucha resistencia. Ya en la última me tocó con el Señor Gregorio Rodríguez Vera. Al empezar la partida ya me di cuenta de que iba a ser una gran lucha de ver quién podría más, si su juego de ataque o mi tenaz defensa. Planteó un sistema agresivo con entrega de peón ( El Gambito Morra en la Siciliana ) y me recordó a las partidas que había estado viendo del I tomo de "Mis Geniales Predecesores" de Gary Kasparov. Salí mal de la apertura y estuve a la deriva durante buena parte de la partida. Pero son estos libros los que te ayudan a ver la fortaleza mental que tenían los maestros de esa época, lucha por la supervivencia hasta la extenuación. Y es lo que hice, en un momento dado Gregorio flaqueó y no lo aproveché, al final tuve que ganarle la partida en los apuros de tiempo. Pese a que tengo que seguir mejorando, he dado otro paso para seguir fortaleciendo mi juego.
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